Más a menudo de lo que la gente cree, las cosas son lo que uno quiere que sean. Incluso el Diablo puede adoptar diversas apariencias. O Esencias.
viernes, 18 de diciembre de 2009
32
Job, Cap. 3.
Así de simple.
Iosephus Dixit
martes, 8 de diciembre de 2009
Sueños
-Abue, necesito un rifle o un arma.
-A ver, toma- me contestaba dándome un rifle de un calibre no muy alto, pero que funcionaría bien.
-Ok- le decía yo- ahora, si logran pasar por la puerta, necesito que subas al cuarto del fondo y te encierres, ¿ok?
-Bueno- me contestaba ella con un dejo de preocupación pero en realidad bastante tranquila en general, tomando en cuenta que una turba de No-muertos empezaba a plagar las calles.
Así que yo tomaba una posición de ventaja en caso de que en efecto lograran entrar. Esperando. El portón de la casa de mi abuela tiene vidrios translúcidos así que poco a poco fueron apareciendo las siluetas tras los vidrios de la puerta. Levantando sus brazos, los asquerosos zombies se acumulaban afuera de la casa acercándose progresivamente empujándose y apartándose los unos a los otros, incapaces de controlar su furia y su apetito. Ahora bien, ¿qué hacían un montón de maquinitas (sí de esas de videojuegos) en el patio de la casa de mi abuela? No sé. Y más aún, "casualmente" todas eran con temas zombie como aquella de "House of the Dead". Así que en ese momento me puse a practicar con los juegos. Una vez que terminé de jugar/practicar me asomé de nuevo a la puerta... Estaban por abrirla, uno de los seres asomó su cabeza a través de uno de los vidrios rotos y le di una merecida bienvenida con una bala en la frente.
El peso de la turba estaba provocando que la puerta cediera así que levanté el rifle y seguí disparando haciendo que los miserables cayeran entorpeciendo todavía más el lento caminar de sus compañeros que ahora se resbalaban en la sangre y tropezaban con los cuerpos de los caídos. Aún así, uno no debe estar tan seguro de la lentitud de los zombies, algunos pueden incluso correr cortos períodos, por lo que lo mejor es detenerlos a distancia, con un buen balazo en la cabeza (Referencia: "Zombie Survival Guide"). Sin embargo las municiones no eran muchas, así que llegó un momento en el que el "click" del arma vacía me indicó que la batalla se tornaría un tanto más difícil y cercana. De alguna manera tenía yo a la mano un bat de cricket (Referencia: "Shaun of the Dead") así que al primer zombie que se acercó entre las maquinitas le puse un batazo en la sien izquierda que de inmediato lo tumbó de espaldas contra el suelo de cerámica del patio de la casa materna. Pero nunca se debe creer que un solo golpe será suficiente para detener a un zombie. No. Hay que asegurarse de que el o la miserable realmente ya no se va a levantar nunca y que no será una amenaza para alguien más. (Referencia: Zombieland) Así que, después de partirle la madre al zombie seguí con mi contraataque rompiendo cráneos a diestra y siniestra. Sé que sobreviví y tenía también la sensación de que mi abuela estaba bien. Sí definitivamente sí sobreviviré al apocalipsis zombie. De ustedes no estoy seguro, pero bueno confío en que sí tendrán las agallas de darme un escopetazo en la cabeza en caso de que uno de esos malditos me infecte. Yo lo haría con ustedes.
Bueno, otra noche, soñé que casi nos arrollaba un tren. Yo iba manejando la camioneta y me acompañaba mi familia. Yo arrancaba y al llegar a la vía, una máquina sin vagones pasaba a unos centímetros de nosotros, pues yo alcanzaba a pisar el freno justo a tiempo para evitar la colisión. No se había escuchado ni un sonido hasta que ya la tenía casi encima. Recuerdo que grité en el sueño, me pregunto si también lo habré hecho "en vivo".
Son curiosas las reacciones físicas que uno puede experimentar cuando sueña. Por ejemplo, hasta hace poco yo tenía un sueño recurrente que me provocaba una inmensa alegría. Incluso placer. Cómo cambian las cosas. Hace unos días la misma imagen en mi sueño ahora en circunstancias distintas, provocó que al día siguiente mi mandíbula se sintiera como si me hubieran golpeado toda la noche o como si hubiera masticado 15 bolas de chicle durante dos días seguidos. Evidentemente yo había apretado los dientes con tal fuerza que los músculos se sintieron agotados, lastimados y un distintivo sabor a sangre se sentía en mi boca. Sí, aparentemente no cabe duda que del placer al dolor hay una línea muy delgada, en ocasiones casi inexistente o incluso en la cual ambas fronteras se juntan. Pero este no fue el caso, pues la emoción sí estaba muy bien delimitada. Furia. Mucha, mucha furia. Y resentimiento. Pero bueno, fue sólo un sueño... ¿no?
Iosephus Dixit
sábado, 5 de diciembre de 2009
Inmortales
En 1953, Don Jorge Alberto Negrete Moreno, se queda dormido en Los Angeles, California y después lo traen aquí, a su tierra, a su México Lindo y Querido, para que sea recibido por las masas que lo admiraban y seguían. Incluso sus propios compañeros le homenajean con respeto y admiración. Duerma tranquilo, mi Teniente, aquí seguiremos disfrutando de su voz inmortal.
Iosephus Dixit
viernes, 4 de diciembre de 2009
Ahora
Sí. Es "Ahora"...
Iosephus Dixit.
jueves, 3 de diciembre de 2009
De Mis Tiempos
Iosephus Dixit
miércoles, 2 de diciembre de 2009
En las Redes de la Red
Y luego vino Facebook. Ah, Facebook. Sí, es cierto que tienes probabilidades de encontrarte con gente que tienes años sin ver (y que muy probablemente seguirás sin ver excepto por esa carpeta de fotos que te permite darte cuenta de lo mucho que esa persona ama a sus gatos o lo maravillosa que es su familia y círculo de amigos). Facebook se vuelve cada vez más inútil para mí, al estar cada vez más lleno de tests inútiles, juegos que no van a ningún lado y en general me es ya asqueroso y me provoca repulsión. Ya no tengo la misma voluntad de antes para soportar esas mamadas. Ya no. En ocasiones incluso me parece que salgo sobrando en algunos de esos sitios. De hecho estoy casi seguro de eso...
Pero ¿qué es lo que dicen? ¿Interacción? Por favor. Tengo un teléfono celular, un Nextel, cuatro correos electrónicos, una cuenta de Twitter. Y, por supuesto, este blog. Quien quiera continuar teniendo contacto conmigo seguramente tendrá por lo menos uno de esos datos que acabo de mencionar y podrá comunicarse en cualquier momento, sin necesidad de que se haga otra cosa. El Hi5 y el MySpace los abandoné hace años. Es más al escribir esto, y recordar el Hi5, me metí y lo acabo de borrar, lo mandé directito al infierno. El Facebook está a punto de correr con la misma suerte. Hace semanas que no entro a esa cuenta. Y maldito lo que me importa. Creo que lo iré desapareciendo poco a poco... Desaparecer poco a poco. Tal vez esa sea la respuesta. Bah... Ustedes disculparán tanto hermetismo, pero es que no he dormido y me da por la azotadera. De todas maneras, fuck las redes sociales.
Fuck this shit.
I want some Whisky.
Iosephus Dixit
martes, 1 de diciembre de 2009
Teoría y ¿Práctica?
Iosephus Dixit
miércoles, 25 de noviembre de 2009
The Cosmos is Also Within Us
"The Cosmos is also within us, we're made of star stuff. We are a way for the Cosmos to know itself."Carl Sagan.
Hace unos días hablé del maestro Carl Sagan. Pues deseo en este momento, aprovechar mi espacio para presumirles lo siguiente:
Iosephus Dixit.
martes, 24 de noviembre de 2009
Can Anybody Find Me Somebody To...
Otra parte de la letra que me gusta mucho es esa que dice "I don't wanna die, sometimes I wish I've never been born at all". Claro que mi favorita de ellos es Fat Bottomed Girls pero bueno, dejo un par de clásicas. Long live the Queen.
Iosephus Dixit
lunes, 23 de noviembre de 2009
I Shall Not Fail That Rendezvous
En la página de la Biblioteca y Museo Presidencial John F. Kennedy (www.jfklibrary.org) me he encontrado con el texto completo de la obra y con el comentario de que era muy del agrado del famoso JFK. Ayer se recordó su dramática cita con la muerte, y me sorprendió el hecho de saber que en ocasiones JFK le pedía a su esposa que recitara el poema para él. Hay que reconocer que, en efecto le fue fiel a su palabra y no faltó a esa cita.
"I Have Rendezvous With Death"
by Alan Seeger
I have a rendezvous with Death
At some disputed barricade,
When Spring comes back with rustling shade
And apple-blossoms fill the air-
I have a rendezvous with Death
When Spring brings back blue days and fair.
It may be he shall take my hand
And lead me into his dark land
And close my eyes and quench my breath-
It may be I shall pass him still.
I have a rendezvous with Death
On some scarred slope of battered hill,
When Spring comes round again this year
And the first meadow-flowers appear.
God knows 'twere better to be deep
Pillowed in silk and scented down,
Where love throbs out in blissful sleep,
Pulse nigh to pulse, and breath to breath,
Where hushed awakenings are dear...
But I've a rendezvous with Death
At midnight in some flaming town,
When Spring trips north again this year,
And I to my pledged word am true,
I shall not fail that rendezvous.
Iosephus dixit
jueves, 12 de noviembre de 2009
Miles de Millones
Qué terrible pérdida para el Mundo y para la Astronomía. Qué terrible pérdida para la ciencia. Qué terrible resulta ver que hoy se siguen creyendo tonterías y supersticiones en lugar de buscar la verdad y favorecer la investigación por encima de creencias ciegas y de la falta de razón. Algo que siempre me ha fascinado acerca del espacio es el hecho de que exista la posibilidad de encontrar vida en otros planetas. Esa idea que trasciende el campo de la Ciencia Ficción, fue también parte de su vida y de sus investigaciones. Fue gran promotor del proyecto SETI y además ayudó a diseñar las placas que fueron montadas en las sondas Pioneer X y XI.
La placa montada en la Pioneer.
La idea de Sagan era que pudiera ser leída
por alguna civilización inteligente fuera de la Tierra
durante su largo viaje en el espacio.
Un grande entre los grandes, un maestro incomparable e irreemplazable, que sea recordado siempre y que sea homenajeado de la mejor manera: mediante la difusión de su mensaje, la promoción de la investigación por encima de las creencias supersticiosas y la destrucción de las ideas contrarias a la ciencia que tanto dañan a la razón y que tanto atrasan el verdadero desarrollo del ser humano al sumirle en la oscuridad de la mentira y la falsa esperanza en magias inexistentes y doctrinas medievales u oscurantistas.
Que viva por siempre la memoria de Carl Edward Sagan (9 de noviembre de 1934 — 20 de diciembre de 1996)
Y aprovechando el viaje, vean el video que aparece más abajo y que es un excelente tributo al maestro Sagan y otros grandes científicos de nuestro tiempo. Creo que otra forma de respetar su memoria sería leer, investigar, cuestionar. ¡No debemos temer! Cuestionemos, no importan las doctrinas ridículas a las que nos han sometido desde niños, tenemos derecho a preguntar y poner en tela de duda... ¡Y qué demonios importa si nos tachan de no creyentes o faltos de fe! Mucho más se ha alcanzado en la historia de nuestro mundo por la curiosidad de los científicos y su deseo de encontrar la verdad que por las doctrinas primitivas y supersticiosas de quienes quieren someter a la raza humana por el miedo y la ignorancia.
Hasta pronto maestro.
Iosephus Dixit
jueves, 29 de octubre de 2009
lunes, 26 de octubre de 2009
Nube de Piensos
Píquenle a la imagen para verla en grande.
Iosephus Dixit
viernes, 23 de octubre de 2009
Back to the Starting Point
Iosephus Dixit
miércoles, 21 de octubre de 2009
Ando Blogueando Bajo
De cualquier manera, como decía hace un momento, hay ocasiones en las que se me facilita escribir. Aunque en este momento, irónicamente, no me es tan sencillo escribir de todo el torbellino de cosas que me pasan por la mente, el alma, el corazón. Lo que usualmente es masmenos sencillo de hacer simplemente colocando los dedos sobre las letras impresas en las teclas, hoy se queda atascado en algún oscuro resquicio dentro de mí mismo. Supongo que no soy el único al que le sucede eso ¿cierto? Supongo que hay otras personas que también pasan por algo similar, el no saber cómo expresar sus sentimientos, sus locuras, sus miserias, sus tristezas, sus melancolías, sus odios, furias, amores, frustraciones, deseos. A todos nos pasa ¿no?
De cualquier manera, apesta. En serio, de repente tengo sueños (cuando logro dormir, cosa que no ha sido fácil últimamente) que creo que en gran medida representan lo que deseo en estos momentos. No soy psicólogo ni esoterista como para saber qué demonios significa lo que sueño, pero de verdad que sí siento que son la proyección subconsciente de un deseo profundo por salir de la total oscuridad. En muchas ocasiones en mi vida he sentido que la oscuridad me acompaña de cierta manera, pero me parecía ver luz.
Sí, ya sé que todo suena raro, azotado, mamón incluso, pero también existe esa necesidad de verter todo lo que se me ocurra en este espacio que, a final de cuentas es mío y si quiero azotarme y si quiero escribir cursilerías y porquerías o babosadas ps a final de cuenta es mi decisión. Bueno el caso es que últimamente así me siento, como caminando a oscuras en una habitación llena de obstáculos, ya saben, pegándose de vez en cuando en un pie al caminar, dando el ocasional tropezón o de plano metiéndome un chingadazo contra un muro o una puerta cerrada que no me permite avanzar un poco más.
Al rato continúo con un poco más.
Iosephus Dixit
¿Por qué?
Pero aunada a estas preguntas tan naturales, siempre me he topado con otra. Un cuestionamiento mucho más corto y conciso que es, paradójicamente, mucho más difícil de responder: ¿Por qué? Sí. Así de simple. ¿Por qué? De acuerdo, el Universo está aquí, ha sido creado (por cualquiera que sea la fuerza, fenómeno, ser superior, causa metafísica, etc), pero ¿por qué?
YO estoy aquí... ¿¿Por qué?? Son pocos los que se aventuran a dar una respuesta... Y nunca he escuchado o recibido una que sea satisfactoria. Creo que es uno de tantos puntos en los que ni la ciencia, ni la filosofía ni la religión tienen una respuesta. Es más creo que es de lo poco en lo que todas esas facetas del conocimiento pueden estar de acuerdo: que no saben por qué demonios estamos aquí.
Y así, viendo pasar a la gente, me pregunté qué tendríamos en común todos nosotros. ¿Habrá alguna esencia que todos compartimos? Supongo que debe haber algo. No lo sé. Pero al ver pasar a cada persona, al observar sus expresiones, gestos, movimientos, me pregunté qué podría estar pasando por sus mentes, cuáles son las cuestiones que les aquejan, los problemas que les quitan el sueño. O tal vez duermen plácidamente sin preocuparse de nada, disfrutando de la vida, y enfrentando cualquier eventualidad o problema que se les presente. Tal vez haya uno o dos que se estén preguntando lo mismo que yo: ¿Por qué estamos aquí? ¿De quién fue la idea? ¿No seremos un experimento barato para un proyecto de ciencias? ¿Qué calificación sacaría? Yo no le daría más de un 8.5. Bueno, OK, un 9... Está bien, está bien... 9.8.
¿Qué sentido tiene todo esto? No tengo la menor idea, espero saberlo en algún momento. Saben, recuerdo que sí he encontrado algo que bien puede funcionar como una hermosa alegoría que podría encerrar en sí misma la respuesta a algunas de estas preguntas. Ya había hablado de ello en otra ocasión. Me refiero a "La Última Pregunta" de Isaac Asimov. La última pregunta... Quisiera que fuera una sola pregunta. Quisiera que fuera la última. Quisiera despejar todas mis dudas. Quisiera saber. Quiero saber.
Quiero la verdad.
viernes, 16 de octubre de 2009
Conocimiento
Durante estos días en los que he estado buscando respuestas a un montón de preguntas que se me agolpan en el cerebro y cuando mi estado mental, emocional y psicológico no ha estado en su mejor momento, me topé con un recuerdo de la infancia que ya desde entonces empezaba a abrir mi mente hacia conocimientos que jamás me habría imaginado (o tal vez lo habría hecho pero mucho tiempo después).
Con ustedes el Maestro Carl Sagan:
Recibir ideas así, abre la mente y se ve el Universo desde otro punto de vista. Aprender es una maravilla que había olvidado. Quiero aprender. Más.
Iosephus Dixit
lunes, 12 de octubre de 2009
¿Qué se Celebra el 12 de Octubre?
Y esto es lo que me parece más fascinante. Este día, lejos de recordar el viaje del navegante genovés, las actividades de esta leal ciudad se detienen, los bancos no abren, avenidas importantes se cierran, el tráfico - como si no fuera suficiente - se aloca en algunas secciones de la urbe. Todo por una pequeña imagen que trajo algún misionero. Y probablemente provenía de España. Y tal vez llegó aquí gracias a que en algún momento, un explorador financiado por la corona española, encontró por accidente un nuevo continente.
Es curioso cómo funcionan las cosas.
Iosephus Dixit
domingo, 11 de octubre de 2009
Pain Again
En más de un sentido.
Iosephus Dixit
miércoles, 7 de octubre de 2009
Provocando a la Censura
Bueno, chinguesumadre, el punto es que así como que el día de hoy no estoy del mejor pinche humor y además traigo unos pinches dolores de cuello y de cabeza (métanse sus albures por el culo) tremendos, por lo que, provocando a la puta censura de mierda, que afortunadamente por estos lares blogueros se remite únicamente a la que me imponga yo mismo, hago uso de estas "malas" palabras, aunque recuerdo al Maestro George Carlin cuando decía que las palabras no son malas, es la intención con la que se utilizan la que es ojete.
El lenguaje puede tener, sin duda, la capacidad de sacar de nuestros pinches sistemas, toda una puta retahíla de frustraciones, broncas, mierdas, pendejadas, encabronamientos, emputamientos, chingaderas y demás babosadas que nos oscurecen el día y nos joden el bienestar. Por eso es que a veces es tan reconfortante el mandar a algún cabrón a chingar a su madre.
Así que para hacer honor a la provocadera de censura, elijo en esta especial ocasión una expresión muy utilizada que denota cierto grado de frustración y encabronamiento. Siéntanse libres de entrar en ese pinche blog hijo de la chingada y leerla las veces que sea necesario para que puedan ventilar sus broncas y quitárselas un poco de encima. No hay de qué.
Que tengan un buen día. Chingada madre.
Iosephus Dixit.
jueves, 1 de octubre de 2009
lunes, 14 de septiembre de 2009
Cosas Que Me Revientan la Madre XVI
Pues sí eso fue lo que pasó, el hijodesuputamadre del agente de tránsito que me paró en la madrugada del sábado sólo me pidió mis documentos y sin decir nada más se largó a su pinche camioneta (diseñada específicamente para soportar su estúpida humanidad) y regresó con el folio ya hecho, me pidió mi firma, lo mandé a la verga, le valió ídem y me entregó mi respectiva multa en original y copia. Que porque me pasé un alto.
Sí, un muy cumplido guardián del orden sin duda. Pero cerrado, falto de criterio, de mente cuadrada. Gracias por cumplir con su deber, oficial. Chingue usted a su PUTA madre. Pendejo.
Iosephus Dixit.
jueves, 10 de septiembre de 2009
Con el Permiso de Todos Ustedes, Una Pequeña Protesta
Ejem... ejem...
WHAT THE FUCKING HELL IS GOING ON IN HERE, WHAT THE FUCK SHOULD I DO?? WHY IS THIS HAPPENING?? NO, REALLY I MEAN IT!! FUCK THIS FUCKING SHIT IN THE FUCKING ASS AND THEN FUCK IT AGAIN AND AGAIN BECAUSE THIS FUCKING SUCKS BIG FUCKING TIME AND I FUCKING HATE THIS WHOLE SITUATION... HEY DESTINY, LISTEN UP!! FUCK YOU!!! GOD DAMMIT!!! FUCK YOU!!!
FUUUUUUCCCCKKKKKKKK!!!!!!!!!!!!!!!!
Iosephus Dixit
viernes, 21 de agosto de 2009
Cosas Que Me Revientan la Madre XV
Hace algún tiempo, Bancomer me ofreció una tarjeta debido a que soy un "cliente distinguido" o alguna mamada por el estilo, y dijeron que en esa nueva tarjeta no me cobrarían ninguna anualidad. Por alguna extraña razón les dije que sí y me olvidé del asunto. Un tiempo después al revisar mi banca en línea, ya aparecía mi nueva tarjeta de crédito Azul de Bancomier (da). Con un cargo. Por anualidad. ¬¬
Y entonces vino la odisea de llamar al "Servicio a clientes" de los estúpidos imbéciles de Bancomier (da). ¿Se han dado cuenta cómo está diseñado ese servicio telefónico? Es el clásico de: "Si desea: Conocer su saldo, movimientos, promociones, estadísticas, o quiere que le hagamos perder el tiempo, marque uno. Información sobre AFORES, Seguros u otras herramientas con las que nos jineteamos su dinero y le hacemos la ilusión de que tendrá un buen retiro, JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA.... ejem ejem, cof cof.... marque dos. Hablar con el departamento de "Nos hacemos pendejos cada vez que podemos 28 horas al día los 487 días del año" marque tres..." Y eso sin mencionar el hecho de que para hablar con un asesor tienes que pasar por tres o cuatro menúes (¿o será menús?).
Me aseguraron que se realizaría una bonificación de la anualidad para que mi tarjeta quedara en ceros. Y sí, hicieron la bonificación... Pero por un monto menor. Y después volvieron a cargar la anualidad. Luego empezaron las llamadas:
Empleado subcontratado para que esté nomás cagando el palo a los clientes morosos: "Buenos días, se encuentra el Sr. Iosephus Chingonus Maximus (así aparece mi nombre en mis tarjetas de crédito y de presentación, qué chingados les importa).
Yo: Simón, puto. Soy yo, qué chingados quieres.
ES: Ah, bien, buenos días señor. Habla Agapito Tololoche del corporativo de Bancomier(da) en la Ciudad de México con respecto a su tarjeta terminación XXXX (aquí imagínense los últimos cuatro dígitos de una tarjeta de crédito, no piensen que se trata de una tarjeta especial para comprar porno muy muy hardcore, pinches cochinos...)
Yo: Sí, qué pedo o qué...
ES: Pues bien, lo que sucede es que presenta un saldo vencido y un atraso de un mes por lo que quisiera saber si podemos contar con su pago el día de hoy señor Chingonus.
Yo: ¿Saldo vencido? Mira grandísimo pedazo de pendejo, esa pinche tarjeta yo ni siquiera la tengo en mi poder, ¿de dónde carajos va a salir un cargo?
ES: ¿No tiene el plástico con usted? ¿No le llegó?
Yo: ¡NO! Además ustedes me dijeron que no me cobrarían anualidad y en mi banca en línea aparece ese cargo que tú me dices. ¿Cómo crees que aparece?
ES: Este... eemmm.... como.... ¿anualidad?
Yo: ¡Bravo! Parece que en efecto entre esa diadema que has de utilizar para estar cagando el palo por teléfono a medio mundo sí existe un pinche cráneo que a su vez contiene un poco de masa encefálica...
ES: ......
Yo: Bueno, igual y eso ya fue demasiado para ti... Ok, antes de que termines de quemar las cuatro últimas neuronas que te quedan, te respondo a tu pregunta de si pueden contar con mi pago el día de hoy: ¡NO! No voy a pagar nada de eso, ya hablé al estúpido departamento de atención a clientes y dijeron que en unos días me comunicara de nuevo para asegurarme de que ya se hizo la bonificación.
ES: Ah de acuerdo señor Chingonus, entonces será necesario que se comunique con el departamento de atención a clientes y se asegure de que ya se hizo la bonificación.
Yo: (Hijo de tu puta madre) Ah, claro, qué excelente idea, no mames... Me quito el sombrero ante tu capacidad de análisis y de resolución de conflictos. Vas que vuelas pa gerente del banco.
ES: Eh, je... Pues sí. Entonces gracias por su atención señor Chingonus, que tenga un buen día.
Yo: Se, se , se... Whatever... (Tealaverga....)
Cuelgo de un madrazo mi teléfono con forma de Harley Davidson y continúo con mis labores diarias.
Un tiempo después, una nueva llamada:
Diferente empleado subcontratado para que esté nomás cagando el palo a los clientes morosos: Buenos días, ¿el señor Iosephus Chingonus Maximus?
Yo: Sí él habla, ¿qué chingaos quieres?
DES: Ah sí, buenos días señor, habla su servidor Rupertino Soplamocos de parte de Bancomier(da) con respecto a un adeudo de dos meses en su tarjeta Azul XXXX.
Yo: Ah qué la chingada... A ver ¿tienes por ahí dónde anotar?
DES: Eh, no señor es que...
Yo: ¡Me lleva la chingada! ¡Pues tatúatelo en las nalgas! NO VOY A PAGAR ESO. Van mil veces que les digo que no voy a pagar porque se supone que ni siquiera me deberían cobrar. ¿Qué no trabajas en el mismo banco en el que están toda la bola de pendejos con los que he hablado? ¿Qué no manejan la misma pinche información en línea?
DES: Bueno, no señor, es que a nosotros nos actualizan las listas cada semana y en ocasiones no alcanzan a sacar a algún cliente y pues nosotros tenemos que llamarlo porque aparece en nuestras listas y....
Yo: ¡Ya, ya ya! Me vale madre, el caso es que no, no voy a pagar y háganle como quieran. No puedo creer que sigan molestándome con eso, carajo. ¿Y qué chingados no llevan un control de llamadas? Ha habido ocasiones en las que me llaman dos o tres veces el mismo pinche día...
DES: Como le comento, en ocasiones no se tiene la relación de qué clientes ya no están en la misma situación y como nuestro trabajo es llamar...
Yo: Su trabajo es cagar los huevos. Nada más. Y ya, ya dije que esto lo veo directo con el banco no con ustedes que no tienen idea de qué chingados pasa. Ya, a chingar a su madre.
DES: Bueno señor, disculpe...
Yo: Tealaverga...
Cuelgo nuevamente mi teléfono Harley Davidson (¿sí vieron la foto allá arriba? A poco no está chingón. Lo tengo desde hace años...)
Las llamadas antes descritas se repiten durante varias ocasiones, de tal manera que pasan más de seis meses. Y entonces... Entra el Despacho de Abogángsters.... *Entra música dramática de película tipo Santo contra las abogadas pirujas del espacio o algo así*
Suena el teléfono (sí, el Harley Davidson, que le suena el claxon y se le prenden las luces. Ta bien chingón.) a las 0700 hrs:
Abogada seguramente malcogida: Buenos días con el Sr. Iosephus Chingonus Maximus.
Yo: Msmsnsñmsssdíasss... ¿Q shings quiere?
ASM: Habla la Lic. Minervina Cerocoito, del despacho Cerocoito y Asociados. Es con respecto a su adeudo de $1,200 pesos con Bancomier(da). ¿Podemos contar con su pago hoy mismo?
Yo: No. Ni hoy ni nunca
ASM: ¿Cómo de que no? ¿Y eso por qué?
Yo: Mire Lic. Ceropito...
ASM: Cerocoito
Yo: Ah sí perdón, como quiera no coge. Mire Lic. para empezar no son $1,200 sino unos $400 y ese asunto ya lo estoy viendo con el banco directamente y ya me dijeron que en efecto no tengo que pagar ni coito... digo ni pito.
ASM: ¿Tiene su número de reporte? ¿Me lo podría proporcionar?
Yo: Simón, a huevo. Tengo como mil. Es el número XXXXXX.
ASM: Tengo que corroborar esto con el banco, los clientes dicen muchas cosas... La auditora viene cada jueves.
Yo: Ah qué interesante Lic. Cerorriata. De seguro usted es el alma de las fiestas...
ASM: Ceropito... ¡Digo Cerocoito!
Yo: Sí, sí... Bueno, como sea, chéquelo con el banco y la chingada y todos los rituales escabrosos que tenga que hacer con tal de que me dejen de joder.
ASM: Muy bien, estaremos en contacto. Si este número de reporte no procede, le llamaré nuevamente y si es necesario se tomarán las medidas legales pertinentes.
Yo: Ay cabrón, qué oficial suena eso Lic. Ceromiembro, claro que sí llámeme todas las veces que considere necesario. Ya sé que es su única oportunidad de tener algo parecido a la interacción y el contacto humano.
ASM: ............
Yo: [Susurrando] Te llegó profundo, ¿eh, perra?
ASM: Buen día...
Yo: Tealaverga...
Por supuesto la Lic. no volvió a marcar porque finalmente, el banco canceló la tarjeta y no pagué ni un centavo. Fuck you Bancomer! De las filas, los asesores, gerentes, cajeros, sistemas caídos y las sucursales con doce cajas pero en las que sólo abren 3, hablamos luego.
Iosephus Dixit.
lunes, 10 de agosto de 2009
Las Tremendas Aventuras de Cosa 1 y Cosa 2 II
Para mitigar los efectos de la elevada temperatura, un ventilador trabaja a marchas forzadas en el hogar de Cosa 1 y Cosa 2. La comida ha terminado y ambas cosas se levantan de la mesa para continuar con sus actividades encaminadas principalmente a aterrar al mundo. La plática en la mesa, en la que aún estamos mi Compare, mi Comare y yo, continúa aparentemente sin problemas. Y entonces (diría Kevin Arnold) sucedió.
Sin aviso previo, sin mayor advertencia, el aire que nos llegaba del ventilador de alta velocidad se esfumó dejando caer sobre nosotros el pesado velo del calor extremo. Un malestar inmediato se dejó sentir entre nosotros al tiempo que nuestra ropa se veía casi inmediatamente empapada por el sudor y, tras la búsqueda de la causa de esa falta de aire, la conclusión no tardó en llegar: Cosa 2 se había adueñado del ventilador girándolo casi 180° (que por cierto era la sensación de temperatura en ese momento) y dejándonos sumidos en ese sauna en el que se había convertido el puerto del Pacífico mexicano.
De inmediato, su madre procede a interrogar al joven Cosa 2 por su conducta tan atrevida:
-¡Oye! ¿Qué te pasa? Vuelve a poner ese ventilador como estaba.
A lo que el joven ladrón de vientos responde presto:
-¡Tengo calor!
La aseveración es inmediatamente repelida por la madre en un cuestionamiento que se basa en la lógica y la idea de que el pequeño acalorado ejercite su poder de deducción y sus dotes de consideración:
- ¿Y no se te ha ocurrido que nosotros también tenemos calor?
La respuesta, clara, rápida, casi salomónica, pero sin regresar el ventilador a su posición original, no se hizo esperar:
Con todo el poder de sus pulmones y una misericordia digna de un santo, el pequeño Eolo nos refrescó hasta el alma con su soplido dando por terminado el engorroso tema y evitando así que nuestros cerebros hirvieran dentro de nuestros respectivos cráneos. Así masmenos:
Gracias Cosa 2.
¬¬
Iosephus Dixit.
lunes, 27 de julio de 2009
¡Próximamente!
Ya merito.
Iosephus Dixit
jueves, 16 de julio de 2009
Cosas Que Me Revientan La Madre XIV
Pero realmente me mega-encabrona, que así nomás de repente, se empiezan a reunir un montón de personas y sin decir agua va, empiezan a cantar (¿cantar? ¿Se le podrá decir realmente a eso "cantar"?) Las Mañanitas. No quisiera entrar en los detalles referentes al hecho de que esa canción no tiene sentido en lo más mínimo (¿"Estas son las Mañanitas que cantaba el Rey David"? ¿Se refieren al monarca bíblico? ¿De verdad no tenía algo más importante que hacer que cantar canciones sin sentido?) pero el caso es que hacen un ruido infernal, gritan como si fuera el maldito fin del mundo y en general son una molestia similar a agarrarse el prepucio con el zipper.
Y hablando de prepucios, ¿cuál es el tema de conversación más apropiado en un momento inútil como ese? Hace unos momentos "cantaron" muy cerca de mi lugar, pero me puse los audífonos con el tema de "The Godfather" a todo lo que daba. Así logré acallar el molesto sonido. Desafortunadamente la melodía terminó justo cuando una compañera (quien por cierto se caracteriza por hablar a gritos) emitió una pregunta digna de una perorata pseudo-filosófica: "A ver, ¿ustedes prefieren a los niños con circuncisión o sin circuncisión?" Bien, como no estoy muy versado en esas cuestiones cumpleañeras, supongo que lo más apropiado para comer pastel (o pie de plátano según pude escuchar) es efectivamente hablar de mutilaciones genitales. Definitivamente han tocado fondo con estas mamadas.
Estoy convencido de que, en algún círculo del infierno, se reúnen un montón de demonios y torturan a los condenados a una eternidad de "Mañanitas", "¡Queremos Pastel!", porras y "¡Queremos que X nos baile la pelusa!"
No está claro si Satán está comiendo a los traidores
o si está tocando la armónica para amenizar "Las Mañanitas".
Frente a él, condenados.
¡¡¡Aaaarrrrrggggghhhhh!!!
Iosephus Dixit
martes, 14 de julio de 2009
Same Thing, Different Way To Say It
One of my favorite shows of all time has been The X Files. I always loved that show for several reasons (some of which I already explained in this post) but one of the main reasons was that the characters never got involved romantically. I always said that The X Files would go to hell the moment Dana Scully (Gillian Anderson) and Fox Mulder (David Duchovny) kissed. And they were just about to do that in the movie Fight The Future.
Anyway it was a great show, and I took the two main phrases of the program as my personal mottoes:
and
TRUST NO ONE
And today I specially like the second one: Trust No One. I haven't used that particular phrase in years, but now I want to use it one more time, I'll brand it in my soul again as I did before, so that I don't give my trust to just anyone. I guess I related to Agent Mulder because he was constantly facing conspiracies (and not just any conspiracy but The Conspiracy), betrayal and of course lies. The base of all conspiracies are lies. And I hate lies. I can't stand people that lie to my face (or those who "hide the truth", because, come on people, that the same fucking shit as lying).
So, I think that's why I liked the program so much. There was another phrase, written on a poster in Mulder's office: I Want To Believe.
And yes, I want to believe, or at least I wanted to believe, because I've always known that the Truth is Out There, but for me that "Truth" is that I should TRUST NO ONE.
Iosephus Dixit
lunes, 13 de julio de 2009
Random Thoughts
- Demonios. Me duele el cuello.
- Tengo hambre.
- Ya me quiero ir a mi casa. Tengo sueño.
- Dude, this is not easy...
- Yeah, I know. Hang in there, Dude...
- A veces me doy cuenta de que en realidad no odio a la gente. En ocasiones nomás me dan asco.
- Ya estoy un poco mejor. Un poco.
- Hijoesu... Me sigue doliendo el cuello.
- Ahora también me duele la cabeza.
- Festliche Music alla Händel (S.K. Elert)
- You know what? I think I AM actually getting better.
- That's great, man.
- Aquel que se dedica a sembrar vientos, cosecha tempestades.
- I'm trapped in a loop of thoughts, I think...
- Dumdirumdirumdirumdirumdirum...
sábado, 4 de julio de 2009
Dádme un Punto de Acceso...
Sí. Así es. Soy Iosephus y soy adicto a Internet.
Iosephus Dixit.
martes, 30 de junio de 2009
Renacer
Y es entonces que entre las nubes, suspendidas en medio del azul brillante del enorme dintel del cielo, se puede ver el brillo de sus plumas. Es como si el mismo Sol hubiese enviado una grácil llamarada que se transportara de un horizonte a otro en esa impresionante mañana de verano.
Extiende sus alas y más que volar parece deslizarse sin problemas, sin resistencia en el aire limpio. Vuela con tanta facilidad que parece que lleva milenios haciéndolo. Allá, detrás de las colinas se eleva una montaña como mudo vigilante de todo lo que sucede a sus pies. Hacia allá parece dirigirse el ave que lleva en su pico varitas del árbol de la mirra y que continúa su incansable vuelo girando con gracia infinita entre las nubes.
Las plumas de escarlata y la cola con destellos dorados cortan el firmamento en un espectáculo tan hermoso como fugaz y los seres de la Tierra, pensantes o sujetos al instinto, quedan más que sorprendidos ante la aparición. "¡Maravillaos ante su presencia, pues es única!" Dicen los sabios cuando hablan de ella. Y continúa su viaje, sabe a dónde va mas no lo que le depara el Destino, pero aún así se enfrenta con determinación ante las corrientes de aire que tratan de distraerla de su objetivo.
Y la gran montaña está cerca y ahí, en la parte más alta y escarpada del coloso, el ave puede ver lo que otros ojos no alcanzan y lo que pocas mentes imaginan: el sereno destello y la majestuosa belleza de una rosa. Hasta ahí se dirige, cada vez más cerca, alas extendidas en oro y carmesí. Y por fin llega, y con fuerza descomunal sus garras se afianzan de las piedras; con majestuosidad vuelve a extender sus alas en gesto orgulloso y deposita las ramas que porta en el pico sobre la roca cerca del rosal. Con agilidad y cuidado construye un nido, mezclando la mirra y las rosas, tejiendo entre espinas y ramas, entre pétalos y rocas. Construye como si en ello le fuera la vida.
Al fin, su nido queda listo y con calma entra en él, como toda una ceremonia, un antiguo ritual. Y parece caer sobre la montaña un solemne silencio: viento, nubes, montaña, sol, todos parecen presenciar con sumo respeto lo que está por suceder. El brillo de sus alas parece empezar a apagarse, parece que le abandonan las fuerzas y un ligero sopor se apodera de su cuerpo; y con repentina claridad brilla de nuevo su plumaje, más fuerte que nunca, se enciende en sus ojos una luz de una blancura más potente que aquella de la nieve bajo el sol. Y su canto hace eco en lo alto de la montaña y en el valle, en el bosque y el arroyo. Suena a sufrimiento, sí, pero a ese sufrimiento que se afronta con fuerza y valentía, con orgullo y coraje. Es un canto majestuoso.
Y vista desde abajo la cumbre se parece a la de un volcán pues un fuego la consume, y entre las llamas se ven los destellos de rojo y dorado y casi se puede percibir el olor embriagante de la mirra y el aroma de las rosas que tienen el honor de participar del magnífico ritual. Y al tiempo que el eco de su canto se detiene, así deja de brillar el fuego y donde antes hubo un nido y las flores crecían como testimonio del Amor de la Creación, donde una vez estuvo el ave, ahora sólo quedan cenizas. Nada más.
No. No son sólo cenizas hay algo más que brilla entre ellas como las estrellas que tiemblan en una noche clara. Y esas luces que ahora brillan con más intensidad entre las cenizas parecen tener cada una vida propia y voluntad y un objetivo. Se unen y en la unión crean más luz y desde esa luz brilla la Esperanza. Y montaña, viento, sol, bosque, valle y agua perciben la alegría del acontecimiento con una nueva explosión que se eleva hasta superar las nubes.
¡De nuevo vuelan el carmesí y el oro! De nuevo canta con el sonido de la Victoria y de nuevo se eleva, desciende, gira. Disfruta. Ama lo que hace, ¿y qué es lo que hace? ¡Vive! Y en la vida está su Gloria y en su Gloria su Herencia Eterna.
Iosephus Dixit.
martes, 23 de junio de 2009
Cosas Que Me Revientan La Madre XIII
martes, 9 de junio de 2009
No Es Personal
El movimiento en la calle era tanto que los numerosos policías, paramédicos y bomberos que iban de un lado a otro apenas si se daban cuenta de su presencia, pero unos pocos lo vieron y supieron en ese instante que las cosas cambiarían de un momento a otro. Sabían que formaba parte de un escuadrón de fuerzas especiales que atendía este tipo de casos de emergencia y algunos estaban familiarizados con su "trabajo". Sabían que era eficiente. Muy eficiente. ¿Demasiado eficiente?
Con tranquilidad llegó hasta el comandante de la policía que esperaba la liberación de los rehenes atrapados por un grupo de asaltantes en un banco. El comandante lo vio y le regresó el saludo tipo militar que había hecho sin mediar palabra. No era necesario hablar en realidad, ambos sabían para qué estaba ahí.
Las negociaciones con los secuestradores estaban en un punto difícil y la tensión crecía cada vez más. Al parecer se hallaban fuertemente armados y por lo visto también bajo el influjo de algún poderoso fármaco lo que aumentaba su irritabilidad, resistencia, paranoia, delirio de persecución y, por supuesto, peligrosidad. Ya habían herido a una persona. Una mujer de 70 años que no había ido a recoger su pensión el día anterior porque su hijo no la pudo llevar. Hoy tomó un taxi. Al parecer la herida de bala en la pierna de la mujer sangraba profusamente y cada vez le era más difícil mantenerse despierta. No le quedaba más de una hora sin atención médica.
-Teniente- le dijo el comandante de la policía- Supongo que ya ha sido informado de la situación.
-Así es Comandante.- Contestó él con calma. No se podía encontrar ninguna emoción en particular en su voz. El Comandante continuó:
-Bien. Las negociaciones no avanzan y ahora parecen estar más violentos que antes. Creemos que tienen más drogas ahí adentro y eso significa que ninguna negociación funcionará. La mujer herida se está quedando sin opciones y esos hijos de puta no planean dejarla salir como muestra de buena voluntad. Es hora de que Usted se haga cargo. Está todo listo.
El Teniente miró hacia el edificio que se encontraba justo frente al banco y asintió con un ligero movimiento de cabeza. Caminaron juntos hacia la entrada del edificio, en donde habían preparado un centro de control y de comunicaciones para las negociaciones con los asaltantes. Al entrar, los policías que se encontraban ahí dejaron de hacer lo que fuera que estaban realizando y algunos intercambiaron palabras en voz baja. Quienes tuvieron oportunidad lo siguieron. Querían verlo trabajar.
Llegaron hasta el sexto piso del edificio desde donde se podía ver perfectamente el interior del banco gracias a los altos ventanales que lo circundaban. Ahí pudieron ver a los 22 rehenes incluida la mujer que era asistida por una joven enfermera que había vencido la inercia y por fin se había decidido a ir al banco a pedir un préstamo para costear material de estudio para su carrera de medicina. No podía hacer mucho por la mujer sin el material adecuado.
Era verdaderamente increíble que un grupo tan pequeño de asaltantes -apenas eran cinco- pudiera mantener cautivas a más de veinte personas incluidos dos guardias de seguridad armados y además mantuvieran a raya a varios grupos de policía y fuerzas especiales de tarea. Pero eso no le importaba a él. Él sabía cuál era su trabajo y cómo tenía que actuar. Otro oficial policíaco, un detective con una camisa azul con las mangas levantadas hasta los codos y el nudo de la corbata a mitad del pecho, sostenía un teléfono en su mano derecha. El cigarrillo entre los dedos de su mano izquierda podía verse como un símbolo de lo que le estaba pasando: consumido, arrugado, cada vez más cerca de apagarse.
El Teniente lo vio y se dio cuenta de cómo en su mirada se reflejaba una mezcla de alivio y resignación por no haber logrado que las negociaciones avanzaran. Era casi como si se diera por vencido y eso le otorgara una tranquilidad que parecía no haber disfrutado en mucho tiempo. El cigarrillo cayó al suelo y fue finalmente apagado por el zapato del detective. El Teniente dirigió brevemente su mirada hacia el todavía humeante tabaco y prefirió no hacer ninguna analogía.
Finalmente eligió el mejor lugar desde el cual podía ver perfectamente todas las áreas del banco en las que se encontraban tanto los asaltantes como los rehenes. Todos en la habitación estaban haciendo algo, pero en el momento en el que el portafolios color plata hizo contacto con el suelo, el sonido que provocó, hizo que todos dejaran por un momento sus actividades de la manera más discreta posible para ver lo que el Teniente hacía. Se quitó el abrigo y después los guantes y colocó todo sobre un escritorio cercano. No dejaba de ver por la ventana hacia donde se encontraban sus objetivos. Al lado del abrigo y los guantes fueron colocados con cuidado los lentes y la boina negra.
Y entonces pareció como si el tiempo se detuviera y solo él tuviera capacidad de movimiento: levantó el portafolio y lo colocó en el escritorio, con habilidad evidente introdujo el código de seguridad en las ruedas numeradas y corrió los seguros para poder acceder al contenido del estuche. Los seguros emitieron un chasquido que, en el relativo silencio de la habitación, sonaron como cañonazos que incluso hicieron que un par de personas saltaran levemente, sorprendidos por el ruido.
En ese momento él levantó su mirada un poco, al sentir la vista de los presentes sobre él; y esto provocó que el tiempo volviera a su curso normal y que todos reiniciaran sus actividades en el ritmo correspondiente pero sin dejar de observar de reojo todos los movimientos de esa leyenda viviente. Él centró su atención enteramente en el contenido del estuche y lo comenzó a armar, con tranquilidad, casi se podría decir que con delicadeza pero con una habilidad única y experta. Cuando hubo terminado su tarea, colocó frente a la ventana que había elegido para su misión, y al mismo tiempo en que la mira telescópica hizo "click" en la parte superior de su Barrett M82A1, fue tanto como si hubiera dicho "Estoy listo". Y sí, en efecto lo estaba. El comandante así lo entendió también y sólo le dijo: "Teniente, tiene luz verde".
Había dos asaltantes en la parte superior del banco, posiblemente habían visto demasiadas películas de acción y sabían que en cualquier momento un equipo SWAT podía entrar por la parte superior sin que se dieran cuenta. Uno de ellos miraba a través de la ventana mientras el otro se encontraba hacia el centro del edificio, viendo y apuntando hacia los rehenes en el suelo unos metros bajo él. El Teniente decidió que ese sería el primer objetivo. Colocó el cargador lleno con 10 balas y se colocó en posición. Su mundo ahora era particularmente pequeño pues sólo existía a través de la mira telescópica con la cual podía ver claramente a su objetivo. Los otros tres se hallaban abajo cerca de los rehenes: uno en la puerta principal, otro más junto al escritorio del gerente del banco, cerca del centro del edificio y el último en medio de los prisioneros tirados en el piso.
Ahora nadie estaba poniendo atención a otra cosa que no fuera el trabajo del Teniente. Y entonces inició. El sonido del primer disparo aún no terminaba de hacer eco en los oídos de los presentes, cuando el Teniente ya había hecho saltar el cartucho vacío del proyectil que ya había hecho contacto con el pecho de uno de los asaltantes ubicados en la parte superior del edificio. El otro aún no terminaba de ver el orificio hecho por la bala en el vidrio cuando un golpe también en su pecho, al lado izquierdo le hizo perder el equilibrio y caer de espaldas. Casi sonrió por haber caído de esa manera y todavía tuvo tiempo de preguntarse qué había pasado. La inmediata falta de sangre en el cerebro impidió que emitiera un pensamiento más y todo se hizo oscuridad para él.
Los tres que se encontraban abajo apenas habían comenzado a incomodarse pues se preguntaban si los policías estaban por darse por vencidos e irse pues todos habían encendido los motores de sus vehículos e incluso las sirenas. Pero era parte de la estrategia para evitar que sobresaliera el sonido de los disparos. El que estaba cerca del escritorio del gerente fue el siguiente. El omóplato izquierdo fue la puerta de entrada para la munición que siguió su camino hasta salir cerca de la axila. El que estaba entre los rehenes pareció gritar el nombre de su compañero pero una bala cortando por mitad su esternón y saliendo por la espalda mientras cortaba su espina dorsal fue motivo suficiente para callar. El que estaba en la puerta sí tuvo tiempo de colocarse en una posición más baja agachándose y buscando el refugio detrás de otro escritorio. La curiosidad claro, provocó que un temeroso ojo se levantara por encima del mueble tan solo para percibir como última imagen, la punta de la munición que llevaba su nombre. Aún quedaron 5 balas sin utiilizar en el cargador.
El Teniente observó a través de su mira una vez más para asegurarse de que no había más movimiento de parte de los objetivos. Todos yacían inmóviles en los lugares en los que habían encontrado su destino, mientras las fuerzas de tarea entraban para liberar a los rehenes. La gente en la habitación aplaudía y se dirigían a la parte baja del edifico para salir y atender a los prisioneros. Casi de manera imperceptible y sin dejar de ver a sus objetivos caídos, el Teniente simplemente emitió la que era su filosofía de vida. Una frase que encerraba su habilidad para hacer bien las cosas sin verse directamente afectado:
"No es nada Personal."
Un pensamiento solitario cruzó su mente una vez que terminó de desarmar el rifle y salió del edificio: "¿Qué pasaría si, en algún momento, fuera personal?" No quiso seguir pensando eso y siguió caminando solo, tal y como había estado siempre.
Iosephus Dixit